Cuando Tito Double P debutó como cantante en “DEMBOW BÉLICO”, el éxito de Luis R Conriquez, su carrera ya era extensa y ampliamente conocida. Jesús Roberto lleva el apellido Laija, que comparte con Hassan, su primo, mejor conocido como Peso Pluma, quien lo introdujo a su colectivo musical como uno de sus compositores. Su primer corrido, “El Belicón”, fue el encargo de un amigo que lo llevaría a entender sus habilidades como letrista y arreglista.
Entonces, ya afincado en Culiacán (nació en Tepic, Nayarit), compuso “Siempre Pendientes” y “El Gavilán”, dos de los grandes éxitos inaugurales de la Doble P y, eventualmente, “PRC” y “AMG”, que catapultaron a los Laija a las grandes ligas. Pero para Tito, un artista que desborda hambre e intensidad, quizás eso nunca fue suficiente. En 2023, tras lanzarse como vocalista, afinó su estilo y encontró comodidad en su propia voz. Su interpretación en “LA 701” dista mucho de la de “CHAMPAGNE” pues sus matices vocales, característicamente roncos y profundos, son cada vez más dramáticos y casi teatrales, como un pintor que es capaz de controlar, de manera simultánea, la intensidad y la finura de su trazo.
Su estilo, el corrido acelerado, se afianzó en INCÓMODO, el álbum debut del nayarita que contiene facetas diversas de su biografía, como la amargura norteña de “5-7” junto a Junior H, la locura taciturna de “LINDA” con Neton Vega o el poder alucinado de “LA BANDOLERA”. Tito Double P representó una inyección de adrenalina directa al corazón que dio más vida a la música mexicana.