Su historia de amor parece salida de un cuento. Se conocieron a los 14 años a través de una compañera de la escuela primaria de Geraldine La Rosa (43), que era vecina de Marcelo Gallardo (42). Cuando él se le presentó, ella –por vergüenza– no quiso saber nada, pero un intercambio de cartas se ocupó de que el noviazgo llegara a buen puerto. La presentación familiar fue en la fiesta de los 15 de Geraldine y antes de emprender vuelo a Mónaco –donde el actual director técnico de River Plate se lució como jugador del Association Sportive de Mónaco Football Club a los 21 años–,fueron padres de su primer hijo, Nahuel (20), y luego se casaron en el Palacio Sans Souci. Al tiempo, nacieron Matías (15) y Santino (12) y se volvieron inseparables.